La impresión es un jugador mayor en el negocio de la información. Todo lo que se imprime comunica información para varios propósitos, incluyendo promoción, entretenimiento y educación. Las tecnologías digitales de hoy, están cambiando virtualmente todo lo relacionado con el negocio de la información.
Web2Print (del internet a la impresión), es sencillamente un mediador entre los impresores y sus negocios físicos, y sus clientes, quienes principalmente buscan captar y obtener beneficios de comprar en la red.
Entendiendo los cambios fundamentales que la economía digital acarrea, nos ayuda a entender la razón por la cual es tan crítico que los impresores adopten la red, la infraestructura de la economía digital, y se apalanquen en ella con el objetivo de conservar relevancia en el negocio de la información.
Definición acordada
WEB2PRINT: El mediador en internet entre impresores y sus clientes. Un equipo de herramientas de software que facilitan la entrada de pedidos a través de la web. Sinónimos: web to print, web-to-print, print e-commerce (red de imprenta, o comercio electrónico de impresión).
Economías de Átomos versus Economías de Bits
El negocio de la información opera simultáneamente en dos economías – las economías “basadas en átomos” y las “basadas en Bits”. El negocio está transformándose rápidamente de pertenecer a una economía de átomos a una de Bits. Nicholas Negroponte introdujo este concepto por primera vez en Being Digital (1996, Vintage) El describe nuestra economía pasada y presente en “átomos” o cosas físicas, las cosas que fantaseamos, fabricamos, y distribuimos. El la llama economía de “manejo humano”, y dice que el futuro es la economía de “bits” o la economía digital, la cual es la “transferencia instantánea y económica de bits a la velocidad de la luz”.
Definición acordada
Economía digital: una economía basada en procesar bits, productos y servicios intangibles, usando tecnologías digitales. Sinónimos: Economía de internet, Web economy.
La impresión hace parte de la economía de átomos (o de lo físico). En la economía de átomos, la creamos y distribuimos en libros, diarios, revistas, correo, volantes, y señalización. El negocio de la información tiene un nuevo sistema de distribución.
Virtualmente, todos los productos vendidos en el negocio de la información pueden ser interpretados en forma digital.
La industria ha venido alentando a los impresores a ofrecer servicios de mercadeo, con el objetivo de diversificar su negocio del que deviene el 100% de su utilidad en la producción de impresos.
Negroponte estaría de acuerdo en que los impresores necesitan encontrar la manera de rendir una parte de sus productos de información en forma digital, y así participar en la economía de bits. Las economías basadas en átomos no desaparecerán – la comida, la vivienda, y el vestuario no pueden ser trasladados y consumidos en una forma puramente digital. Pero nosotros trabajamos en el mercado más afectado por este cambio monumental, dado que el negocio de la información está perfectamente diseñado para ser distribuido digitalmente. No confunda la economía digital o de bits con la impresión digital; En gran medida, toda impresión está basada en átomos ( cosas físicas).
¿Recuerda la alharaca en la década de 1990 acerca de la potencialidad del internet? Casi todo eso tuvo que ver con el hecho de que no entendíamos las implicaciones de un sistema de distribución deflacionario; en otras palabras, donde los costos decrecen rápidamente. Sí, lo voy a repetir. Los costos de distribución en la economía digital van en picada. O como Chris Anderson lo escribe en Free: The future of a radical price (2009, hyperion), estamos “corriendo hacia el inevitable precio de lo gratuito”.
Por ejemplo, a Google le va a costar el 50% menos pasar sus videos de YouTube el próximo año (costos de ancho de banda), y al mismo tiempo, manejar su cuenta de Gmail le va a costar el 50% menos a Google (Costos de almacenamiento).
En la década de 1990 pensamos que podíamos cosechar los beneficios de la economía de bits sólo con habilitar en línea la adquisición en la economía de átomos. Por ejemplo, no hay manera de trasladar la comida para perros a un producto digital; de ahí que las únicas eficiencias reales están en la capacidad que tienen los clientes para comprar vía internet. Pets.com implosionó porque el mundo no necesitaba otro sistema de distribución de comida para perros en la economía de átomos. Por otro lado, Amazon prospera, porque crea un inventario ilimitado en el mercado de la información es un beneficio inmenso, incluso si se están despachando átomos a los clientes.
Ahora con el Kindle, Amazon ha transformado su producto matriz en una forma puramente digital para participar directamente en la economía digital. En julio de 2010, Amazon reportó qué las ventas de Kindle (economía digital), han sobrepasado las de los libros (economía de átomos), en la compañía.
Comparación lado a lado: dos economías
| Economía de átomos | Economía de bits o digital | |
| Distribución | LentaCostosaTrabajo físico intensivo | InstantáneaGratuitaTrabajo mental intensivo |
| Basada en | Lo escaso | Lo abundante |
| Precios | Inflacionarios | Deflacionarios |
| Inventario | Limitado | Ilimitado |
| Creado | Medios MasivosPublicidad | Publicidad dirigida por relevancia |
| Progreso | Incremental | Exponencial |
| Divisa | Dinero | DineroReputaciónAtención |
| Consumo | Una vez | Ilimitado (con retornos crecientes) |
| Gratis | Apoyo en publicidad | Apoyo en la publicidadModelo válido de negocio |
Un sistema de distribución que tiene un inventario ilimitado y cuyo costo de distribución es deflacionario crea una economía basada en abundancia y no en la escasez. En el mercado de información basado en átomos, los precios se basan en la escasez; hay sólo unos cuantos comerciales de TV que usted puede vender durante el Súper Tazón; hay espacio sólo para algunas pautas publicitarias en las revistas. Una economía abundante incluye un número ilimitado de libros (Amazon), un número ilimitado de canciones (iTunes), y contenido ilimitado (blogs, wikis, sitios web), porque el costo de las adiciones incrementales es esencialmente demasiado bajo para medirlo.
¿Qué hacen los inventarios ilimitados a la selección de productos y a la idea de los éxitos en ventas? Chris Anderson lo explica de una manera brillante en The Long Tail (2006, Hyperion). Este inventario ilimitado (“La Larga Cola”) representa “El fin del monopolio de los grandes éxitos en ventas, pues los hits se ven obligados a compartir el escenario con un número incontable de productos nicho que le apuntan a la estrecha demanda del consumidor.” El álbum Thriller, de Michael Jackson fue un éxito en ventas en parte porque teníamos un inventario limitado de donde elegir- los mejores 5000 álbumes. Hoy tenemos acceso a nuestros verdaderos gustos (ejemplo. Jazz, Indie Fusión), porque la economía digital permite que una plataforma como iTunes ofrezca el servicio de nichos de mercado de una forma tan efectiva como si la ofreciera al mercado masivo.
Velocidad de cambio
Si está asombrado, póngase el cinturón de seguridad porque la velocidad de cambio en la economía digital es exponencial. La ley de Moore es el ejemplo más famoso de progreso exponencial en el mundo digital. Ésta afirma que “el número de transistores que pueden ser integrados en un circuito se duplica aproximadamente cada dos años.” Y Anderson señala que “el precio del ancho de banda y almacenamiento está cayendo incluso más rápido.”
El mundo digital combina las mejoras incrementales por invenciones y descubrimientos, dándole a este una brusca curva evolutiva.
La economía de átomos se mueve de forma creciente; la economía de bits se mueve exponencialmente. Un efecto colateral de estas diferencias de ritmo es que los actores de cada economía tienen diferentes niveles de confort con el cambio. La gente en la economía de bits ven el cambio como ubicuo y rápido; la gente en la economía de átomos ve el cambio ascendente y lento. Una de las partes acepta el cambio; la otra es precavida y escéptica con frecuencia.
El mercado de software es un buen ejemplo. Hoy en día el software es comúnmente vendido en dos maneras básicas: Licencia o Software como suscripción al servicio (SaaS).
Definición acordada
Licencia de software: un instrumento legal que le concede al comprador el derecho a usar el software, el modelo de negocio es comúnmente un monto de la licencia inicial con mantenimiento anual.
Definición acordada
SaaS (software como servicio): un instrumento legar que concede el uso de software sobre un tiempo específico (ej. Mensualmente). El modelo de negocio es comúnmente una suscripción mensual.
Hay aun un debate activo en la industria de la impresión acerca de las licencias versus las suscripciones para Web2Print Solutions. Mientras que nosotros en la economía de átomos debatimos este asunto, la economía de bits ha evolucionado incluso hasta otras invenciones revolucionarias que incrementan radicalmente las eficiencias y reduce los costos del despliegue de software – informática de nubes. La informática de nubes es lo último en el foco global de recursos – Alquile únicamente lo que necesite por incremento de minutos (banda ancha, almacenamiento, poder de procesamiento).
El gobierno de los Estados Unidos estima que la utilización de servidores promedio en sus 1100 centros de datos es del 7%, una cantidad increíble de desperdicio en muchos recursos críticos, la electricidad siendo el más obvio de todos. Contener esos recursos en un modelo informático de nubes puede permitirle al gobierno pagar únicamente por los recursos que consume, representándole un ahorro increíble en hardware, software y energía.
Mientras los impresores aún lidian con decisiones acerca de licencias versus SaaS, la economía digital corre tras más optimización. Tal vez una de las lecciones más importantes que podemos aprender de la economía de bits es que debemos aceptar el cambio o nos quedaremos en el olvido
El nuevo «libre» (gratis)
Un economía abundante construída en bits y un sistema de distribución gratuita crea un tipo muy diferente de libertad. La libertad de Anderson se construye sobre la distinción átomos vs. bits de Negroponte, y sus propias ideas alrededor de «la cola larga» y describe de manera brillante el impacto de la economía digital en el modelo de negocio libre. Él escribe, «mientras que la libertad de entregar productos gratis del siglo pasado era un método de marketing poderoso, la libertad de entregar productos gratis en este siglo es un modelo económico enteramente nuevo».
Si, aun tenemos esa libertad que la publicidad apoya. Google es el punto de movilización para «libre para mí» apoyado por la publicidad en la web. Se piensa en Google como una compañía de software, pero Googletiene un modelo de negocio mediático muy tradicional.The New York Times vende lectores a anunciantes (medios relevantes). Los anunciantes en Google pagan para que nosotros podamos buscar de manera gratuita. Las compañías de medios de difusión se mantienen en asegurar que la publicidad en línea está destruyendo su negocio. La publicidad en internet está devaluando rápidamente el mercado de información basada en átomos, porque los medios masivos son ineficientes, molestándo al 90% de nosotros en la tarea de encontrar a los pocos interesados en el producto. Piense en los comerciales de prótesis dentales que sus hijos ven. La búsqueda de Google entrega relevancia a nivel individual, y esta es una mejor estrategia, además le abre camino a la publicidad en un mercado mucho más grande.
La aproximación de los medios masivos tuvo tantos desperdicios que sólo los bolsillos más profundos podían pagarlos. Hoy en día, si usted es un especialista en árboles Bonsai en San Francisco, puede pagar publicidad en linea, porque Google sólo le cobrará cuando alguien haga click (lo cual es muy poco desperdicio).
Probablemente la implicación más radical de esta nueva economía es un modelo de negocio viable que se basa en ofrecer su producto o servicio gratuitamente. No ese «gratis» artificial de antes, un «gratis» real para la mayoría de los usuarios de la solución para siempre. Así, el nombre «freemium» se introduce en el léxico de la Web 2.0.
Definición acordada
Freemium: un modelo de negocio por el cual un producto o servicio (por lo general una oferta digital como software, medios, juegos o servicios web), se ofrece libre de costos, pero uno de primera calidad se cobra por características avanzadas, funcionalidad, o productos y sevicios relacionados.
Whattheythink.com ofrece una combinación de freemium y premium apoyado por la publicidad. La mayoría de los espectadores lo tienen gratis por tiempo indefinido – apoyados por ámbos, publicidad y suscripciones de miembros premium. Los videojuegos en línea son otro modelo donde la mayoría de jugadores juegan cuanto quieran sin gastar dinero, subsidiados por aquellos jugadores que eligen opciones de mejor calidad y pagan por ellas.
La versión Web 2.0 de freemium es la más interesante. Hay un número tremendo de servicios gratuitos hoy en día, a través de estos modelos que proveen valor real a largo plazo para la mayoría de los usuarios. Ofrece una gama completa de software de administración de proyectos como Basecamp de 37 Signals, hasta el software de campañas por correo electrónico de MailChimp.
Un modelo exitóso de negocios freemium normalmente apunta por lo menos al 5% de la conversión de usuarios comunes a la oferta «Premium».
La clave para este modelo de negocio es multifacética. Prestar el servicio para el 95% debe incurrir en costos casi inexistentes (piense inteligentemente en un software fácil de usar porque los costosde apoyo pueden matarlo), y luego piense en escala. Este modelo sólo funciona si usted es capaz de escalarlo, por consiguiente, el 5% de conversión es una cifra significativa. Algunas de estas compañías combinan freemium con corrientes de ingresos del apoyo por parte de la publicidad, pero hay un modelo de negocio 100% freemium que está funcionando hoy, donde están construyendo negocios exitosos regalándole sus servicios al 95% de los clientes.
Cuando el cambio ocurre, la oportunidad golpea a su puerta, y puede haber efectos colaterales. «La devaluación rápida del mercado» (término de Anderson) es parte de esos efectos colaterales. Los ejemplos son sorprendentes. Considere el mercado de las enciclopedias. Britannica era el lider de esta industria de 1,3 billones de dólares en 1991. En 1993, Microsoft lanzó Encarta, y como buen capitalista de riesgo, Josh Kopelman lo describió, «cada dolar que Microsoft gana ha causado una cantidad asimétrica de dolor en el lugar de ventas. Ellos hicieron dinero exprimiendo el mercado.» El mercado de las enciclopedias se cortó a la mitad en menos de 3 años. Así es como trabaja la devaluación.
La impresión (junto a otras economías basadas en átomos en el negocio de la información), está experimentando una forma de devaluación; al rítmo en que se crean nuevas compañías de distribución digital, el mercado de átomos se extingue.
La producción de impresos será siempre un producto físico (economía de átomos), pero eso no significa que los impresores no puedan apalancar las ventajas de la economía digital en sus negocios. Permanecer competitivo en la economía de átomos requiere aprender las eficiencias de la economía de bits. El mejor ejemplo publicado que he escuchado, vino del periódico más antiguo de publicación contínua del mundo, The Daily Telegraph .
Su agente de tecnología en jefe, Toby Wright, se cambió a un modelo de software 100% SaaS con su infraestructura informática en la nube, reduciendo drásticamente los costos y permitiendo que The Daily Telegraph se enfocara en la actividad fundamental de crear contenido valioso para sus lectores.
Para permanecer competitivo, un negocio de economía basada en átomos debe apalancar todas las ventajas de la economía basada en bits.
El cambio nos impacta a cada uno de nosotros individualmente. Los autores citados aquí nos ayudan a entender la raíz de esta transición de una economía basada en átomos a una economía basada en bits, y como ésta impacta a la industria de la impresión. Entender que esta es una transición global puede ayudarnos a navegar mejor y a trazar un curso que inspire más que parálisis.
Traducción y publicación en http://www.grafix.com.co con autorización de Web2print.