Por Heidi Tolliver Walker
Últimamente he estado haciendo un poco de lectura acerca de la impresión en 3D. Es gracioso, porque mientras la tecnología está basada en la inyección de tinta, ésta realmente no es impresión en todo el sentido. Ésta realmente es fabricación aditiva. Pero esto suena muy complicado, así que la impresión 3D se queda definida con el nombre a usar.
Actualmente, estamos en las etapas iniciales de la impresión 3D donde todos tratamos de averiguar cuáles serán los productos y fuentes de ingresos futuros que aparecerán. No todo el mundo puede producir pieles de automóviles, envolturas cosméticas para prótesis, o fundas personalizadas para iPhone. Para la industria de la impresión, ¿Qué productos y servicios tienen sentido para nosotros?
El setenta por ciento del mercado de la impresión 3D se reporta como prototipos. El 30% restante de los productos son de fabricación directa en pequeñas cantidades, así como los regalos personalizados, artículos especializados, e incluso obras de arte (echa un vistazo a “Attracted to Light“ de Geoff Mann»).
Los prototipos y la fabricación a súper corto plazo sin duda pueden ser menos costosos que el uso de los métodos tradicionales, pero ciertamente no son baratos. Sólo tienen un enorme potencial.
Puedo ver el uso de la impresión 3D en artículos de promoción o incentivos. En lugar de personalizar el nombre de alguien en un artículo promocional, como una pelota de béisbol o pescados de origami troquelados (dos de los cuales han tenido un gran éxito como parte de paquetes de correo directo en 3D), ¿Por qué no personalizar una funda de iPod («Danos 1 hora de su tiempo y obtendrás la funda para llevar tu iPod! «)? O ¿Por qué no utilizar una foto del perfil en LinkedIn de alguien para crear un modelo 3D de la cabeza y los hombros?
Hay enormes posibilidades aquí. ¿Cuáles son algunas de tus ideas?
Fuente: http://bit.ly/158vh4t
Traducido y publicado en www.grafix.com.co con autorizacion de http://whattheythink.com