Dokkummer Vlaggen Centrale (DVC), con sede en el norte de Holanda, decidió comprar recientemente un equipo de impresión para textil, una impresora de producción industrial Rhotex 320.
Con su poderosa cartera de más de 40.000 clientes, DVC, que fue fundada hace 75 años como un pequeño negocio de una familia frisona, hoy en día es un importante proveedor europeo en el mercado textil de las banderolas y banners, incluyendo tumbonas, parasoles, forros y manteles.
Producción interna
De unos años a esta parte, estos artículos que normalmente se realizaban mediante serigrafía, están siendo fabricados en menores tiradas y volúmenes usando una impresión digital textil de gran formato, relativamente pequeña. DVC todavía da trabajo a equipos de producción serigráfica, en vez de subcontratar estos trabajos a algún país con bajos salarios en cualquier parte del mundo. Es el único proveedor de Europa con una instalación de última tecnología para la impresión serigráfica de alto volumen con una reproducción de color de la más alta calidad. Todavía sigue teniendo una gran demanda pero la tecnología digital se está haciendo cada vez más popular, incluso en DVC.
Impresión digital textil
Para imprimir banderolas y banners bajo demanda, la compañía estaba usando impresoras digitales de gran formato de las más pequeñas y captan el trabajo a través de su propia web “on demand”, donde la impresión de banderolas y banners puede ser directamente solicitada tanto por el usuario final como por compradores corporativos, por igual. Mientras que la serigrafía continuará usándose para grandes volúmenes, la compañía decidió redirigir parte de este trabajo que les llega vía web hacia una de las verdaderas impresoras textiles digitales para producción industrial, la Durst Rhotex 320. Banderolas de alta calidad y otros productos textiles pueden producirse rápidamente, minimizando las etapas de producción. Los tiempos de cambio de material también se han reducido al mínimo. El director general de DVC, Robert Jan Hagheman, nos comenta: “Los clientes quieren ser capaces de poder reaccionar a las tendencias del mercado inmediatamente y esperan que nosotros entreguemos los trabajos en pocos días. Ahora podemos cumplirlo al 100%.
Producción Industrial
El director general de DVC, Robert Jan Hageman, nos explicaba que este es el primer paso en la producción industrial digital textil, pero queda más por venir. “Cuando la maquina Durst esté produciendo al máximo, seremos capaz de emplearla dentro de nuestra extensiva producción de banderolas y banners, sabiendo que la máquina será capaz de producir durante 24 horas y parcialmente desatendida. Mi gente está sorprendida del know how tecnológico que incorpora. Es una máquina extremadamente robusta y nuestros operadores recibieron parte de la formación para el uso de esta máquina en Brixen (Italia) y parte en nuestra planta de producción en Holanda. La máquina estaba instalada y en funcionamiento en un solo día.
Obviamente, primero comprobaremos la respuesta de la máquina cuando entre en producción de 24 horas, pero no me extrañaría que, en cierto tiempo comprásemos, una segunda unidad. En Holanda DVC tiene una cuota de mercado de aproximadamente el 45% y nuestras páginas webs facilitan considerablemente la expansión en Europa. Nuestra producción sigue en aumento.”
Reorganizando la producción
DVC celebró recientemente su 75 aniversario con un ‘Open House’ para invitados y clientes, familiares y amigos. El nuevo equipo es parte de un amplio abanico de cambios en la compañía. “El cambio es una parte esencial de nuestro negocio”, comentaba Mr. Hageman. “Para integrar la máquina en nuestro entorno de producción, decidimos reorganizar el equipamiento en nuestro área de producción en Dokkum.
Ahora mismo tenemos una sección de serigrafía y una nueva área para producción de impresión digital de alto volumen. Obviamente, para finalizar las banderolas y banners también hemos necesitado emplazar nuestros equipos de acabado en la configuración más lógica.”
Web to print
Robert Jan Hageman nos explica que en los últimos años DVC se centraba específicamente en la creación de nuevas páginas webs que facilitasen en gran medida la entrega de los trabajos de producción. “Hacemos una distinción entre compañías y usuarios finales individuales, quienes requieren sus propias banderolas o banners para una silla, parasoles o cualquiera de nuestros 400 productos.
No es una separación muy diferenciadora pero tratamos de adecuar
el servicio en función a las necesidades de cada grupo. De hecho em- pezamos con nuestra tienda online “My own flag” (mi propia bandera, traducido al español), que se dirige al consumidor final, pero cuando notamos que las compañías tenían necesidades similares decidimos crear una aplicación comparable para ellos. Por supuesto traduciremos nuestras páginas webs para que puedan ser utilizadas desde otras partes de Europa.
Fuente: http://www.durst-online.com