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Publicidad interactiva con códigos QR y Datamatrix.

Desde los años 70 hemos podido ver códigos de barras en la mayoría de nuestros productos de consumo, una información óptica legible directamente por una máquina. Con el avance de la electrónica y los ordenadores, este método supuso una ventaja real para la gestión del control de productos. Históricamente, el primer producto impreso con un código de barras fue un chicle, en Junio de 1974. Desde entonces, se ha convertido en algo universal, usado extensamente en todo el mundo, por todas las marcas ya sean comerciales o industriales.

El principio fundamental, que a continuación se explica, fue creado tomando como base el código Morse de los años 40. Los puntos y rallas se sustituyeron por líneas finas y gruesas para codificar información. A lo largo de los años, algunas patentes han sido presentadas, pero su lectura seguía siendo un problema. Demasiado compleja. Poco tiempo después, el sistema fue rápidamente unificado bajo la normativa universal de código de producto1. Los primeros lectores fueron bolígrafos de fotodiodos, que incluían una fuente de luz, la única herramienta eficiente disponible, a un precio razonable, en ese tiempo.

El código de barras 1D permite codificar información relativa al nombre, y cuando está vinculada a una base de datos, permite obtener el precio u otra información relacionada. Sin embargo, la cantidad de información que puede ser codificada en un código de barras sigue siendo baja, básicamente no excede de una palabra. Esta es la causa de que hace un par de años hayan sido desarrollados otros códigos de barras. Muchos de ellos se mantuvieron en propiedad o para uso limitado en determinada rama de la industria. Para el etiquetado y marcaje de productos manufacturados, la mayoría de ellos fueron definidos según ciertas necesidades especiales. Sin embargo, gracias a la mejora de los lectores digitales por medio de escáneres láser o cámaras digitales, el código de barras evolucionó, de una dimensión a dos dimensiones, incluyendo información codificada tanto horizontal como vertical- mente y aumentando considerablemente la cantidad de información codificable. Usado en primera instancia para propósitos industriales, el código de barras 2D ha evolucionado y ahora su uso se dirige hacia el gran público. Dos tipos de códigos de barras 2D son, actualmente, los estándares de facto: el código QR y el Datamatrix

El primero, el código QR fue desarrollado en 1994 en Japón y es un código abierto desde 1999. La descripción general del código es la siguiente

Fuente: http://fr.wikipedia.org/wiki/Fichier:QR_Code_Structure_ Example_2.svg

Podemos ver que, obviamente, la cantidad de información aumenta de forma considerable. Más información codificada significa también más capacidades, como programas codificados ópticamente.
En paralelo, tenemos la información de posición y alineamiento para permitir que el código de barras 2D sea descodificado, de la mejor manera posible, por el escáner. Hoy en día los escáneres son muy simi- lares a una cámara digital. La imagen será procesada por un pequeño software, y junto con la mejora de resolución de la cámara, el código 2D será legible rápida y fácilmente.

Los códigos QR se utilizan sobre todo en Japón, mientras que el Datamatrix es más común en la industria europea.

El código Datamatrix es de fuente abierta, no tiene depende de ninguna patente y responde a la normativa ISO/IEC 16022.

La cantidad de información puede alcanzar un máximo de 1.5kB, dependiendo del número de celdas impresas. Se leen de acuerdo al siguiente patrón:

Protocolo de lectura del código de barras 2D Datamatrix

Las barras verticales y horizontales de la izquierda y de abajo calibran el proceso de decodificación y muestran donde empieza y acaba el área codificada.

Para ambos códigos podemos establecer diferentes resoluciones dependiendo en las instrucciones codificadas. Las instrucciones pueden ser, una tarjeta de visita, un número de teléfono, un SMS, un texto libre, una dirección web. Además, se establece un cierto nivel de corrección de errores, se incluye información redundante aumentando el número de pequeños cuadrados, incrementando así la cantidad total de información.

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process – Noticias de Durst para la ciencia y aplicación de la impresión de inyección de tinta – Número 93 – Febrero 2013

Ciencia y Técnica

Códigos QR que redirigen a www.durst.it (con baja corrección de error en el izquierdo y gran nivel de corrección en el centro) y misma infor- mación en un código Datamatrix (derecha)

Muchos sitios web ofrecen generadores de códigos de forma gratuita y la mayoría de los lectores de códigos, para las principales plataformas de aplicaciones para dispositivos portátiles, son también ofrecidos sin cargo.

La popularidad de los códigos de barra 2D está aumentando constante- mente debido a su flexibilidad, apareciendo mientras navegas2 por la web o directamente impresos sobre páginas de anuncio o posters.
Este tipo de códigos permite una interacción más profunda entre la pieza publicitaria y el lector. Por supuesto, con la mejora día a día

de las cámaras incorporadas en los dispositivos móviles, el código se convierte en algo indispensable y ya casi siempre forma parte de la publicidad impresa, especialmente en los videojuegos, ordenadores y la mayoría de los dispositivos de electrónica de consumo.

Sin embargo, también observamos que estos códigos aparecen cada vez con más frecuencia en los envases de productos alimenticios o cosméticos. Los códigos de barra 2D son ya una parte más de la imagen general y la gran resolución de impresoras, como la Rho P10 o la Omega permite incluirlo dentro de la imagen. Incluso con minúsculas celdas de ~1mm x 1mm, el código de barras 2D será completamente legible. La interacción entre anuncio y lector es mucho más profunda, las nuevas tecnologías permiten registrar el número de personas que accede a la página web, ofreciendo un feedback tanto cualitativo como cuantitativo y casi en tiempo real, de la interacción con el público.

Fuente: http://www.durst-online.com

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